Por: Lorenzo Díaz
Hace exactamente un año, durante las
olimpiadas de Londres 2012, comenzó a circular por las calles de la ciudad lo
que se ha convertido en la versión del futuro de un gran clásico de transporte público.
El nuevo “London Bus” —inspirado en el icónico Routemaster de la postguerra— es
la solución a los retos del transporte público que el gobierno de la ciudad
desarrollo con un equipo liderado en la parte de diseño por el estudio de
diseño de Thomas Heatherwick.
El reto no era fácil, el famoso
“double-decker” había ya evolucionado y crear una nueva versión que superara a
todas las existentes, para generar una única solución que siguiera siendo el
icónico autobús símbolo de esta gran ciudad, se veía complicado.
Les comparto una serie de fotos de los
autobuses que me topé por la ciudad, un clarísimo ejemplo que el diseño es
mucho más que un montón de ideas románticas o de soluciones técnicas apegadas a
normativas abultadas. Heatherwick ha sabido conjugar el valor cultural de una
leyenda de la gran urbe con la modernidad máxima en eficiencia, desempeño y
consumo. Este nuevo autobús consume 40% menos de combustible y es 3 metros más
largo.
Quedé sorprendido por el simple hecho de
ver como la re edición de un clásico se incorpora con perfección a la imagen
mental de ciudad que tenemos, dándole la modernidad y eficiencia necesaria sin
perder un milímetro de clase y estilo. No podría ser mejor ejemplo de lo que el
diseño puede hacer por una ciudad y su sociedad.
Fotografía: círculo cuadrado
No hay comentarios:
Publicar un comentario