Ideas de Tierra es un despacho de decoración de interiores y exteriores que integra como elemento central a la naturaleza
Eunice Mier y Daniel
Diez son escritores, diseñadores, agrónomos. Ambos tienen una pasión especial
por los libros y las plantas. Por ello, buscaron una manera de integrar las dos
cosas. Así fue como nació hace nueve meses, “Ideas de Tierra”, una boutique
exclusiva de arte en plantas con un sello muy especial.
Los “arbolibros” es su
producto más exitoso. Son libros antiguos de donde emergen diferentes plantas. Un
concepto que siguen consolidando, y que a futuro, les encantaría que mucha
gente tuviera esta metáfora del amor por la literatura, la lectura y las plantas.
En Ideas de Tierra crean
arte objeto para integrar la naturaleza a los espacios porque muchas veces no
es posible tener un jardín dentro de un departamento, por ejemplo.
Eunice y Daniel se
enfrentan a un gran prejuicio: mucha gente les dice: ¿Cómo puede ser posible,
ustedes que son escritores, perforen ediciones impresas? “Justamente porque
somos escritores sabemos lo que significa que un libro viva sus últimos años en
un estante viejo, ya polvoroso, olvidado, humedecido, lleno de moho y polilla, esquelético,
ya casi muerto”, expresó Eunice.
Agregó que se trata de ejemplares
que viven muertos porque la gente ya no los lee. De hecho, están a punto de ser
quemados o irse a la trituradora. Por eso, esta pequeña empresa desea darles un
uso nuevo a través de plantas que crecen nuevas dentro de sus páginas. Y así es
como los convierten en arte objeto verde.
“Por supuesto que sí nos
hemos topado con algunas obras maravillosas, como por ejemplo: Desayuno en Tiffany's del escritor Truman Capote, y me dije: ‘este no lo voy a
perforar’, pero me di cuenta que la
mitad de la novela estaba rayada, alguien le pasó un plumón encima,
entonces, era imposible leerla. También me sucedió algo parecido con ‘Las
confesiones de Sor Juana Inés de la Cruz’, la cual tenía arrancadas la mitad de
las páginas, entonces, son libros que ya no sirven verdaderamente”.
El éxito de Ideas de
tierra es la creatividad, la innovación y la originalidad. A Eunice y Daniel
les encanta estar inventando y también el trato con las plantas. “Cada libro
que hacemos tiene un cuidado muy especial: escogemos los árboles, los podamos,
les damos una forma. La verdad es que cuando terminamos cada arbolibro, siempre
les hablo bonito diciéndoles: ¡qué guapos quedaron! Es una conexión importante
con cada uno de los arbolibros”.
Hay muchas empresas que
se dedican a las plantas, pero el origen de Ideas de Tierra es hacer algo
diferente y único. Tratar de estar innovando constantemente para tener
productos nuevos y no dejar de sorprender a la gente. “Todas nuestras
creaciones son nuestras, no le copiamos nada a nadie. Esa ha sido la estrategia
para diferenciarnos de la competencia”, comentó Daniel.
La idea de arbolibros es
una marca registrada y está protegida por el Instituto Mexicano de la Propiedad
Industrial (IMPI). La parte que tienen patentada es el proceso especial que
hace que los libros no se maltraten y que el agua nunca toque ninguna de sus
páginas.
Además de libros,
también utilizan maletas y neceseres antiguos, trastos viejos, maderas
recicladas y tratadas.
Un trasto viejo con
hierbas de olor podemos encontrarlo desde los 200 pesos y una banca de madera
tratada tiene un valor de 3 mil 800 pesos.
Finalmente, Eunice y
Daniel se consideran “malabaristas de la tierra, las flores y las plantas”. Su
credo es la búsqueda de lo insólito. “Amamos la naturaleza como el poeta ama
las palabras, y tratamos de componer versos con hojas y tierra. Sabemos que las
hojas y las plantas son infinitas. Hay tantas y tantos modos de combinarlas
como historias puedan contarse. En Ideas de Tierra escogemos unas pocas –para
nosotros, las mejores- y las modelamos y adornamos para nuestros clientes”,
concluyeron.
Fotografías: cortesía
Ideas de Tierra
Que padre artículo y que original idea, me gusto!
ResponderEliminarNo se vale utilizar de este modo las joyas literarias. No es justificable el hecho de que los libros sen olvidados cuando su verdadero valor es de caracter CULTURAL y no estético para terminar decorando un rincón del hogar. Mal por estos "emprendedores".
ResponderEliminar" ...La idea de arbolibros es una marca registrada y está protegida por el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI). La parte que tienen patentada es el proceso especial que hace que los libros no se maltraten y que el agua nunca toque ninguna de sus páginas".
ResponderEliminarO sea cómo? la patente del proceso "especializado"? si solamente es hacer hoyos en los libros para luego colocar una maceta ahí... incurro en delito si hago eso? jajaj o.O