Un espacio inmersivo que fusiona diseño industrial, entretenimiento interactivo y gastronomía para crear experiencias memorables.
Este espacio de entretenimiento fue concebido como una experiencia inmersiva que reúne tecnología, diseño y gastronomía en un entorno contemporáneo. Su propuesta combina boliche, simuladores deportivos —como golf, fútbol, Fórmula 1 y béisbol— y salas de karaoke, lo que lo convierte en un punto de encuentro versátil y dinámico para todo tipo de públicos.
La atmósfera se construye a partir de una estética industrial y moderna, donde el concreto aparente y la madera son protagonistas. Se incorporaron celosías y muros acústicos que no sólo optimizan el sonido en cada área, sino que también enriquecen la narrativa espacial al integrarse como elementos visuales. La disposición del mobiliario, con mesas altas y zonas abiertas, fomenta la interacción espontánea y refuerza el carácter social del lugar.
La funcionalidad y el confort fueron ejes clave durante el desarrollo del proyecto. Se utilizaron materiales de alta calidad y soluciones arquitectónicas eficientes que aseguran una operación fluida entre las distintas actividades sin interferencias acústicas. Este cuidado en el diseño favorece una experiencia continua y placentera para los usuarios.
Finalmente, la propuesta gastronómica complementa la experiencia integral con un menú cuidadosamente seleccionado, pensado para acompañar y potenciar cada momento. Así, el espacio se consolida como un referente en innovación, convivencia y disfrute en un entorno cuidadosamente diseñado.
Fotografía: Jorge Taboada
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