Proyecto ganador de la categoría Comercial en el XII Premio de Interiorismo Mexicano PRISMA.
El objetivo de
este proyecto era crear un espacio completamente interactivo entre los niños y
el espacio, hacer un lugar cálido, profesional, que permitiera cambiar la
perspectiva de lo que significa ir al dentista, más para los niños. La idea fue
crear un área de juegos al “aire libre” traduciendo
las casas del árbol. Crear el concepto que van al laboratorio de un ratón, en
la sala de espera se encuentra la primera puerta pequeña que indica que el
ratón esta trabajando y la segunda puerta se encuentra en el consultorio de
niños, donde la puerta se abre y podrás ver la colección de dientes y su pequeño laboratorio.
El diseño busca transformar el miedo y estrés de los niños al
acudir a este tipo de consultas en una experiencia divertida, en un espacio con
formas curvas que los mantenga curiosos, tranquilos y en confianza, para ello
se creó el laboratorio del Ratón de los dientes.
El local, ubicado en Puebla, tenía un espacio profundo con geometría irregular, por lo que se generó un pasillo central para conectar los consultorios con el laboratorio, bodega, sanitario y salas de espera. Se generaron planos compositivos con muros, mobiliario diseñado a medida e iluminación neutra.
Consta de una
sala de espera para adultos, recepción con área de juego y espera para niños. 3
consultorios —2 consultorios para uso general y uno para los niños— cuenta con
un cuarto de máquinas y un pequeño laboratorio y baño para uso del personal. El
local fue entregado en obra gris y el gran desafio era la forma del local, que de fachada nos
daba 8 m de frente y al interior terminaba en 3.50 m, tuvimos que realizar
una distribución perfecta para acoplar a todos los espacios requeridos por el
cliente y que además estuvieran amplios para poder ocuparlos. Se hizo la
propuesta completa del proyecto de interiorismo, contemplando distribución y acabados.
Fotografía: Amy Bello
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