Un diseño que hace un merecido tributo a las raíces culturales y la artesanía.
La
colección Firefly adquiere un nuevo punto de vista gracias al estilo atrevido
de Olga que busca romper con lo convencional combinando originalidad y
elegancia estética. Las nuevas versiones, creadas a partir de elementos
elaborados a mano en porcelana, destacan por su inesperada gama cromática y
acabados. Colores fríos, como el azul o los grises antracita, combinados con la
calidez del cobre y el oro con acabados en brillo o mate.
A la
particularidad de estas lámparas, y únicamente durante la presentación del 8 al
12 de febrero en Zona Maco, se añade la opción de personalización con técnicas
ancestrales del pueblo Wixárika. Las pantallas de estas lámparas se pueden
adquirir en una versión única, directamente de la mano de los artesanos de la
asociación Kauyumare, que difunde y pone en valor el arte del comúnmente conocido
“huichol.
Una
iniciativa que nace del propósito compartido de Olga Hanono y de Lladró, junto
con Kauyumare, de enaltecer, respetar y trascender la artesanía mexicana. De la
misión de crear arte a partir de la actualización de las raíces culturales y, a
la vez, de generar belleza desde la sostenibilidad y el respeto al medio
ambiente.
Zona Maco,
la feria de arte contemporáneo más grande de Latinoamérica, ha sido el marco
elegido para presentar las nuevas versiones de la colección Firefly de Lladró
intervenidas por Olga Hanono. Una edición especial muy exclusiva compuesta por
cuatro lámparas: inalámbrica, de techo, de pie y sobremesa, en edición limitada
de solo 10 unidades cada una.
Fotografía: portada Rodrigo Fernández / grupo y detalle Círculo Cuadrado / producto y retrato cortesía Olga Hanono
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