Maniobras mayores



Por: Gerardo Cantú
La comercialización de especies grandes está enfocada a proyectos que por sus características rebozan de sofisticación y ambición para el que proyecta, al mismo tiempo, el autor entiende el valor implícito en el tamaño del árbol deseado, debido a las múltiples maniobras humanas y mecánicas que implican el buen manejo de estos gigantes.




Maniobras mayores utilizadas para trasladar y plantar especies que por sus características y tamaños requieren de una fuerte movilización de personal y recursos. Sembrar un árbol adulto es un acto responsable y aplaudible, siempre y cuando se tengan en combinación conocimientos directos, experiencia en el movimiento y construcción en estos especímenes, donde el tiempo y el cuidado son factores primordiales de exitoso futuro.

En esVerde, consideramos especies grandes a partir de los 5m de altura, asimismo, tomando en cuenta factores de edad que delimitan la envergadura y el grueso del tronco, el cual junto con el basamento de la raíz, imprimen el mayor factor de peso para el árbol. En nuestra experiencia, el espécimen más alto que nosotros hemos trasplantado, fue un liquidámbar que medía 36m de altura, estamos hablando de aproximadamente 10 toneladas y media, para lo cual utilizamos grúa y 20 personas en cada una de las maniobras de banqueo, traslado a invernadero, maniobras de carga y descarga a plataforma y los movimientos que implican la última maniobra de venta al consumidor final.

 
El banqueo o extracción bajo procedimiento implica un metódico trabajo quirúrgico, el cual será primordial para que el espécimen perdure en fuerza, belleza y forma, extrayendo el sustrato comprimido entre las raíces, sustrato que mantiene los minerales y al mismo tiempo envuelven las raíces principales y sus pelambres, para que al final el árbol sea levantado suavemente para depositarlo en una súper-bolsa diseñada para cargar y soportar sin ningún problema.

En cada maniobra tenemos que contemplar un jefe de piso encargado de verificar de forma continua la integridad del espécimen, cuidado del ejemplar y el entorno, sin descuidar la precisión orquestada en capital humano y grúa.


Nosotros recomendamos que al contratar un servicio de construcción para jardines con especies antiguas o monumentales, estén pendientes de la trayectoria y la experiencia de su prestador de servicio, ya que de esto depende la integridad de la especie, así como hacer sentido al aplicar una inversión inteligente al proyecto.

La belleza que graba al diseño final una especie enorme, representa de manera espontánea el paso del tiempo, el cual es un tesoro invaluable que por congruencia de los procesos; implica un costo mayor que colocar pequeños árboles de invernadero, los cuales en el mejor de los casos tardarán más de una década en tomar un tamaño razonable según sea el caso de la especie seleccionada.


Fotografía: cortesía de Gerardo Cantú


@esverde_mx

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