Cañada San Francisco por HGR Arquitectos

Un conjunto habitacional de 14 casas ubicado en la Ciudad de México que además de respetar los árboles existentes en el terreno, tiene un diseño limpio y de pocos acabados donde el uso de la vegetación es parte fundamental de los espacios.

Por: podio @podiomx

El reto principal del proyecto fue lograr acomodar el programa en un terreno de características muy complicadas; con tan solo un frente a calle de 7 metros y a través de una bajada de más de 100 metros de longitud y 11 metros de desnivel, se llega a la zona de desplante de las casas las cuales se acomodan en 2 plataformas distintas con un desnivel aproximado de 3 metros de altura.

El proyecto plantea 5 bloques que van desde 1 hasta 4 casas de 250 m². Los bloques se conectan a través de un pasillo abierto que funciona como vestíbulo y área de convivencia para las casas y se conecta directamente con la zona de estacionamiento. A lo largo del pasillo se colocaron macetas de barro con distintos tipos de vegetación que, en conjunto con el tabique aparente utilizado en los muros, genera una sensación de calidez al transitar por el mismo.

Cada casa se desplanta en una superficie de 9 x 9 metros y se conforma de 4 niveles: la planta baja está destinada al área social de la casa, mientras que los 2 niveles superiores son para el área privada. Se dejó también un semisótano como área de servicio. Todos los espacios de la casa cuentan con ventilación e iluminación natural.

Las casas se diseñaron de manera muy geométrica y ordenada para tener así volúmenes limpios y espacios interiores eficientes y bien aprovechados. Ciertas superficies se extrajeron de los volúmenes para generar balcones y terrazas a lo largo de la casa. Estos espacios se acabaron con tabique aparente para así generar un contraste con el resto del volumen. Todas las casas cuentan con un jardín privado con distintas dimensiones de acuerdo a su ubicación en el terreno.

Parte importante del diseño fue respetar los árboles existentes en el terreno, por lo que las casas, el estacionamiento y la vialidad de acceso se acomodaron de tal manera que no se afecte la vegetación. Adicionalmente, se capta el agua pluvial de todo el conjunto permitiendo así tener una buena reserva de agua destinada para el riego de todas las áreas verdes.

Al tener un diseño limpio y de pocos acabados, el uso de la vegetación es parte fundamental de los espacios. Se colocaron distintas especies de árboles en las áreas comunes y en los jardines, generando así contraste con los muros blancos y balanceando la escala y proporción del conjunto. También se utilizó una barrera de bambú para dividir los bloques de casas y ayudar a la privacidad de los espacios, generando vistas verdes a lo largo del conjunto.

Fotografía: Diana Arnau