Por Mitchell Rodríguez
Al
principio la aceptación de los artesanos para generar un equipo de trabajo no
fue la más favorable, ya que en el pasado existieron diversos factores negativos
con diseñadores que abusaron de
ellos. Otros cuantos ya tenían una idea muy arraigada de cómo realizar su
trabajo, y pocos se prestaban al intercambio de ideas para pulir la técnica en
la fabricación y la exploración nuevos diseños.
Pero poco a poco, gracias al entusiasmo y trabajo de la
diseñadora Marisol Centeno, se fue
integrando un grupo de artesanos que aceptaron la idea de trabajar con nuevas
propuestas y experimentar con la técnica aprendida por herencia. Así fue como
Bi Yuu fue creciendo y de igual manera el impacto social de su capital Humano.
El beneficio para los artesanos al trabajar junto a Bi Yuu ha tenido resultados
favorables, ya que colaborando de esta manera aprenden nuevas cosas y obtienen
ingresos mayores.
La ventaja al unirse al equipo es que cuentan
con trabajo constante, venta segura, tratos directos y el pago de precios
justos por sus piezas realizadas, consiguiendo de esta manera que sus
colaboradores se sientan más valorados con su trabajo y obtengan un fuerte
apoyo familiar.
Bi Yuu nos compartió un interesante análisis sobre su trabajo
que se resume en los siguientes conceptos:
El 90% han
mejorado la calidad de su producción propia.
El 91% han
despertado su interés en innovar.
El 100%
están más preparados para atender pedidos más grandes y exigentes con la
calidad.
El 91% sienten
que se han convertido en artesanos más profesionales.
El 100% han
incrementado sus técnicas textiles y conocimientos.
Y sobre todo el 100%
del equipo está satisfecho.
Fotos: Marisol Centeno/Onnis Luque
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