Por Eugenia González @eugeniagg y Lorenzo Díaz @lorenzodiazEn respuesta a las publicaciones negativas que se le presentan a nuestra sociedad en torno a la contaminación Diederik Scheemann preparó un banquete muy positivo. En equipo con el fotógrafo Aldwin van Krimpen documentaron la transformación de los desechos encontrados en diferentes ubicaciones en la ciudad de Rotterdam, en Holanda, para convertirlos en apetitosos platillos y llevando el diseño de comida al siguiente nivel.
El proceso se realizó en tres etapas: el registro de la basura tal como la encontraron, la documentación de la paleta de ingredientes y el resultado de la transformación en una arriesgada y muy bien lograda visualización fotográfica. Con el apoyo de la marca M4four, una marca holandesa de pisos a la medida, lograron impactar a los peregrinos del diseño con una muestra compuesta por las imágenes y los mismísimos Rubdishes.
Como auténticos pepenadores Diederik y Aldwin recorrieron la ciudad de Rotterdam buscando los lugares donde la basura se acumula, desde la que flota en los puertos hasta un contenedor de una estación del metro, ambos descubrieron que una vez que comienzas a buscar hay ingredientes frescos listos para ser encontrados en todo lugar.
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| Diederik Schneemann |
Para Diederik esta no fue su primera presentación en Milán, en el 2011 presentó “A Flip Flop Story” una investigación sobre los 30,000 kilos anuales de sandalias de playa que son tragadas por el océano y terminan su camino en las playas Africanas. En el 2014 presentó su colección “3D printed Mash Up Collection” haciendo un remix de diseños famosos que transformó en propios llamando la atención hacia los asuntos de derechos de autor que se continúan desarrollando junto con la dinámica industria de la impresión 3D.
Los medios han presentado a Diederik como un contador de
historias, con un concepto y acercamiento típicamente holandés. Para él como
diseñador de productos no siempre es posible crear algo que va más allá de la
función y la estética, o la combinación de ambos, lo que le dio la necesidad de
agregar un elemento más y comenzó a experimentar con las posibilidades que
ofrece la fotografía. Pensando afuera de su caja de diseño en tres dimensiones
se le abrieron interesantes posibilidades creativas. En el fotógrafo Aldwin
van Krimpen encontró al co-autor
perfecto para llevar su proyecto de la comida al siguiente nivel.
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| Aldwin van Krimpen |
“Para mí la fotografía es una extensión de mi campo como
diseñador, un elemento más. Abre las posibilidades creativas como si tuviera un
juego más de herramientas. En este proyecto quisimos mostrar la belleza de los
desechos por medio de nuestra paleta de ingredientes, así con una evocadora
fotografía del plato llevamos al observador más allá de la realidad” afirma Schneemann.
“Alejarse del uso final de los materiales parece una
aventura, un recorrido por caminos de terracería sin saber cuál será el
destino. Lo que hemos descubierto con este acercamiento no difiere mucho
del que hubiéramos conseguido con el diseño
en 3D normal, en el que el objetivo es agregar valor al producto por medio de
estética, la selección de materiales y la expresión conceptual. Me encantó el
reto de hacer algo de la nada, de basura.”
Fotografías de Aldwin van Krimpen
www.studioschneemann.com
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