Ubicada en Tepoztlán, Morelos, esta casa se integra con el paisaje mediante un volumen sólido forrado completamente en piedra texcal, originaria de la zona en la que se encuentra.
A
petición de los clientes se proyectó una casa que favoreciera las vistas al
Cerro del Tepozteco, sin romper con su entorno inmediato. Pensando en estos
principios se diseñó en 2 volúmenes tipo nave intersectados de tal
manera que todos los espacios disfrutan de deseadas vistas.
Como
elemento de intersección de las dos naves, se diseñó un patio que conecta ambos
volúmenes y los 2 niveles en los cuales está desplantada la casa. Al mismo
tiempo genera un recorrido alrededor del cuál se dividen las áreas públicas y
privadas. A lo largo de este recorrido se van logrando diferentes vistas hacia
el árbol ubicado en este patio central.
Otra solicitud importante por parte de los clientes era tener un muro a doble altura
en el que pudieran colocar una gran colección de máscaras y una biblioteca. Se
decidió dejar la doble altura en la sala teniendo un gran ventanal que ve
directamente al Tepozteco. Este espacio se vuelve el punto central de la casa
en el que gran parte de las actividades se realizan.
Una
amplia terraza sirve como conexión entre el interior y el exterior permitiendo
refrescar los interiores sin dejar pasar tanto calor.
El
diseño de la casa crea espacios limpios, con mobiliario y
carpinterías integradas. Se seleccionaron acabados naturales como el techo y piso
de madera, la piedra Texcal y pisos de cantera que dan la calidez necesaria
para disfrutar este refugio de fin de semana.
Fotografía: Diana Arnau
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