Un proyecto con voluntad de respeto al entorno urbano que dialoga con la vialidad y el contexto.
El edificio se desplanta sobre un basamento como
respuesta al ruido y falta de privacidad del contexto inmediato, sin
comprometer las visuales exteriores. El basamento te guía al pórtico, el cuál
tienen la voluntad de respeto al entorno urbano, este dialoga con la vialidad y
el contexto. El pórtico conecta al espacio principal del proyecto, el patio, el
cual funciona como elemento de integración social y solución a la ventilación y
asoleamiento de los departamentos. Está ubicado en Playa del Carmen, Quintana
Roo, a escasos metros del mar caribe, un proyecto de vivienda multifamiliar con
135 departamentos.
Los departamentos se configuran a partir de un sistema
de ejes que permiten maximizar las visuales francas y cruzadas hacia el
contexto. El primer sistema funciona de manera perpendicular a la calle
Flamingos y con un giro de 13° respecto a la calle 42 Norte, lo que genera
visuales al patio. El otro sistema de ejes alineados a las calles laterales
genera visuales hacia el contexto.
La materialidad consiste en muros recubiertos de
pintura acrílica gris en la parte exterior del proyecto. En el basamento se
utiliza acero corten. En el rooftop se utilizan vigas metálicas de color
negro para generar un corredor techado el cuál facilita la lectura del
edificio. Por ultimo los parteluces de concreto prefabricado funcionan como
parte fundamental en el lenguaje del edificio. Estos brindan corporeidad a la
volumetría y responden las orientaciones de las fachadas.
Las amenidades se encuentran en el último nivel,
uniéndose a los dos volúmenes habitacionales a través de la alberca, ubicada de
esta manera con la finalidad de conseguir visuales hacia el mar para todos los
usuarios del conjunto.
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