Por Podio @PodioMX
Este nuevo edificio busca mantener la inercia positiva y enriquecer la experiencia de tránsito peatonal brindando una calle más segura y ampliando la oferta de vivienda en la zona, la cual posee una ubicación privilegiada al encontrarse muy cerca de la Alameda Central y el Palacio de Bellas Artes. CD4 además de reforzar la iniciativa anterior se desarrolla en el terreno que ocupó la “Casa Bravo Reyes” que por muchos años produjo los telones y confeccionó el vestuario para las más importantes obras teatrales y operas de la Ciudad de México, una casa que decayó en los primeros años del Siglo XXI, producto del abandono.
El edificio cuenta con dos locales comerciales en planta baja, uno de los cuales se convertirá en una galería de arte subterránea y el otro en un café de barrio. En los niveles superiores hay doce pequeños departamentos tipo estudio, desarrollados en cuatro niveles y en el último nivel hay una terraza con salón y gimnasio. La zona comercial pretende convertirse en un punto de encuentro de la comunidad artística a través de exposiciones, presentaciones de libros y una cartelera cultural que, inclusive, tome simbólicamente esta calle por medio de actividades para todo el público y la comunidad del barrio, así como la población flotante.
Este proyecto focalizó su filosofía de intervención teniendo como prioridad la calle, así como las actividades que pueden detonarse en ella con la presencia y dinámicas que generaría de este edificio en conjunto con su predecesor ubicado en el número 8 del mismo callejón. Lo edificado proyecta un lenguaje de fachada sobrio pero permeable con una serie de elementos que permiten configurar balcones y terrazas tanto como patios para el acceso al local comercial, a la galería y al lobby de acceso. Juega con la altura de los edificios colindantes para convivir y mantener la misma escala en cuanto a su imagen urbana.
El lobby en planta baja permite ver algunos de los rastros del edificio preexistente y concentra las circulaciones verticales, conduce a lo largo de los cuatro niveles a plantas tipo con tres departamentos equipados con cocina, sala-comedor, baño y una recámara. Su disposición en planta sigue la condición de que todos tengan ventilación e iluminación natural al interior. En el último nivel se encuentran las amenidades, todas con una vista espectacular de la Torre Latinoamericana, donde se ubica el gimnasio, la terraza y una sala común, así como servicios para todo el edificio. El proyecto mantiene en todas sus áreas una paleta de materiales discreta, un espacio silente y confortable diseñado con colores neutros. El barrio, sus sonidos, su color y todo su movimiento se quedan afuera, pero sin dejar de ser parte de la experiencia de ser visitante de una de las zonas más dinámicas de la Ciudad de México.
Fotografía: Marcos Betanzos
www.boue.com.mx
No hay comentarios:
Publicar un comentario