Aprendiendo los pequeños secretos para hacer un mueble de calidad

Por: Lorenzo Díaz


El pasado 7 y 8 de septiembre realizamos un workshop en las instalaciones de grupo di en conjunto con Masisa México y Häfele y debo de confesar que fue una muy grata y fructífera experiencia.


Masisa siempre ha tenido la visión puesta claramente en el horizonte lejano, siendo un productor de materia prima se interesa en el usuario final, en el que realmente va a vivir con sus paneles, como ningún otro productor. 

Es más que claro para ellos que, si los paneles nos son transformados en un producto valioso, el esfuerzo de comercializarlos no serviría de nada. Sin esta visión establecida, para todos nosotros, no estaría construyendo un posible futuro para los jugadores involucrados en la industria del mueble.


Con esa idea en mente en grupo di constantemente estamos intercambiando ideas con ellos y fue así como llegamos a la idea de hacer un workshop que nos permitiera compartir esos pequeños secretos que, a lo largo de 42 años de experiencia, creemos hacen un gran mueble.

Entre más de 80 despachos  de diseño que respondieron a la convocatoria, se seleccionó a poco más de una decena, sin duda un grupo muy talentoso y sediento de conocimiento. El intercambio de experiencias que resultó fue fantástico. Logramos intercambiar ideas como pocas veces me ha sucedido y creo que todos aprendimos un poco y hoy sabemos cómo hacer mejores muebles.


La experiencia resultante no es de soslayarse. Los workshops se han puesto de moda, pero parece ser que lo que hoy sobra es información y lo que hace falta es experiencia. Este taller logró llenarnos a todos de grandes experiencias. Los jóvenes diseñadores que compartieron con nosotros salieron entusiasmados de haber descubierto cuan noble puede ser el oficio de mueblero (o mueblista como les gusta llamarle en Chile, país de donde son originarios nuestros amigos de Masisa).

                             
 
Descubrimos juntos el mundo de los paneles, el universo de los herrajes, los secretos más íntimos  de la maquinaria moderna para el trabajo de la madera y viejos aliados como el Sistema 32 concebido hace ya décadas por Häfele. Algo es seguro, vamos a repetir esta experiencia más de una vez en el futuro. ¿Alguien se apunta?







Fotografía: cortesía de MASISA

1 comentario:

  1. Buen artículo, los paneles sándwich son una forma segura de ahorrar dinero en las facturas de electricidad.

    aislamart.mx

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