Interiorismo funcional y contemporáneo.
Este proyecto residencial, ubicado en una de las zonas más exclusivas de Mérida, partió de una premisa clara: crear un hogar funcional, estéticamente cuidado y adecuado para recibir visitas. La propuesta de interiorismo se desarrolló a partir de la visión de los propietarios, quienes buscaban un espacio contemporáneo que combinara comodidad y estilo.
El diseño se centró en una planta abierta que integra sala, comedor y cocina. El objetivo fue lograr que cada área tuviera una identidad propia sin perder la coherencia visual del conjunto. Para ello, se trabajó con materiales y acabados que permitieran una transición fluida entre espacios.
En la sala, se utilizó un recubrimiento de madera de piso a techo que aporta calidez y delimita el ambiente. Este mismo material se extiende hacia el comedor, generando continuidad y ritmo visual. La paleta de colores neutros refuerza la sensación de serenidad, mientras que el mármol Volakas se incorpora como elemento distintivo: en la sala, a través de una mesa de centro, y en el comedor, como revestimiento en el muro principal.
La cocina mantiene esta línea material, incorporando cubiertas de piedra tecnológica que complementan los tonos del mármol. Se diseñó como un espacio social y práctico, con una isla central que facilita la interacción y gabinetes de carpintería a medida que optimizan el almacenamiento.
Cada decisión de diseño responde a criterios de funcionalidad, estética y confort. El resultado es una residencia que transforma la experiencia cotidiana de sus habitantes, ofreciendo espacios pensados para convivir, descansar y disfrutar.
Este proyecto refleja una visión clara del diseño interior: crear ambientes que respondan a las necesidades reales de quienes los habitan, sin perder de vista la calidad espacial y el cuidado en los detalles.
Fotografía: Jesús Lozano
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