Una remodelación que propone una forma
de habitar más funcional, sin perder la
intimidad y su conexión con el presente.
Este proyecto de remodelación transforma una residencia en un espacio cálido, versátil y profundamente habitable. Concebido para una pareja joven con visión de futuro, el diseño propone ambientes que pueden evolucionar con el tiempo, adaptándose a nuevas dinámicas familiares sin perder su carácter acogedor.
Cada área está pensada para ofrecer una experiencia distinta: desde zonas íntimas que invitan al descanso y la contemplación, hasta espacios sociales que fomentan la convivencia y el disfrute cotidiano. La distribución favorece la creación de microambientes dentro de cada habitación, generando rincones que permiten momentos de pausa, conversación o trabajo, según se necesite.
El estilo general se inclina hacia lo contemporáneo, con una atmósfera serena y elegante. La elección de colores, texturas y mobiliario contribuye a una sensación de lujo discreto, donde cada elemento parece estar en su lugar por una razón emocional más que funcional. La transición entre áreas públicas y privadas se da de forma fluida, permitiendo que el recorrido por la casa se sienta natural y envolvente.
La zona familiar se convierte en un núcleo activo, donde distintas actividades pueden coexistir sin interferencias. El diseño favorece la conexión entre espacios, creando una narrativa doméstica que se adapta al ritmo de quienes la habitan. La recámara principal, concebida como un refugio personal, ofrece una experiencia de confort y sofisticación que se extiende al baño y vestidor, pensados como extensiones del descanso.
La iluminación, cuidadosamente integrada, acompaña los distintos momentos del día, transformando la atmósfera según la hora y el estado de ánimo.
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