Ubicadas en un
edificio sobre Paseo de la Reforma, avenida principal de la Ciudad de México,
las nuevas oficinas para una compañía estadounidense de entretenimiento fueron
diseñadas con la idea de flexibilidad de las formas de trabajo, tanto
individual como colaborativo y con un estilo fresco.
Los espacios
abiertos para el trabajo individual dividen sus secciones por medio de dos
tipos de alfombras que guían la circulación; a su vez, las estaciones que
pertenecen a diferentes departamentos se separan por medio de estructuras
metálicas que también sirven para mostrar el arte e identidad de la compañía
por medio de posters iluminados y televisiones, así como por medio de plafones
con pérgolas de madera y jardineras flotantes.
Los espacios
cerrados se distinguen por lambrines de madera clara y las áreas comunes como
la cocina abierta en colores verdes en sus pisos y muros de cerámica, que
sirven como zonas de comunicación y convivencia entre los mismos colaboradores
y clientes, le dan más vida y dinamismo al espacio, junto con las lámparas de
diseño que juegan con efectos de luces y las sombras, resultando ser un
ambiente menos tradicional y con mucha identidad para unas oficinas.
Fotografía: Sergio
López
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