La Visual De... Una casa más, un pedazo de memoria menos

El libro Tiempos Modernos. Arquitectura del Siglo XX en León, publicado este año y editado por el Instituto de Cultura de León, reúne lo que ha sido la culminación de un primer esfuerzo por evidenciar el valor de las obras cumbres de la arquitectura de esa ciudad en el periodo que abarca los años 1900 a 1960. Un esfuerzo que ha implicado recorrer un camino de más de tres años en el que con determinación se han documentado y visibilizado diversos inmuebles valiosos que narran la evolución y la historia misma de la ciudad a partir de zonas como el Centro Histórico o colonias como Bellavista, Arbide y Andrade.

Por Marcos Betanzos @MBetanzos
Los autores: Carlos Flores Montufar, Alejandro Orozco, Salvador Zermeño, Juan Bonilla Olmos y Mariano Arreola Calleros, recorren estilos, periodos y espacios señalando las características y aportaciones de estas obras (la mayoría viviendas) que, como ya es costumbre se han consolidado en verdaderos casos vulnerables, espacios susceptibles de desaparecer silenciosamente ante la parálisis colectiva, y una narrativa consolidada desde las autoridades locales en el vox populi como consecuencia del “proceso natural de transformación de la ciudad”.




Las causas –lo sabemos- son otras más y no son tan simples, entre ellas están el olvido, la falta de valoración, la ignorancia de autoridades o propietarios para protegerlas, el desinterés gremial y la debilidad de instrumentos para salvaguardar (toda) la arquitectura del siglo XX y claro está: la voracidad inmobiliaria que ha dejado paso franco a una serie de edificios anodinos que bajo pretexto de la densificación o la satisfacción del mercado han comenzado a tomar el lugar de muchas de estas arquitecturas que ilustran la modernidad en el bajío.




Ejemplos de lo que se ha ido hay muchos. Un botón de muestra que está sentenciada a desaparecer para dar lugar a un conjunto de vivienda vertical es la casa realizada por Antonio Attolini Lack (1931 - 2012) ubicada en la avenida León 402, colonia Jardines del Moral, concluida en los años sesenta con 2300 m2 de construcción en un predio de 7,000 m2; clave INBA: JM-PA-001 que ha comenzado a ser desmantelada ante la mirada de todos y la responsabilidad de nadie. La casa de dos niveles que muestra aún la intención clara de un diseño integral en cada uno de sus espacios y elementos constructivos ha perdido ya las letras que evidencian al autor, comienza a perder sus acabados e inicia su conversión a escombro y memoria, lo que quizá solo podrá ser rescatada en las páginas de un libro futuro.




La desaparición de esta obra nos habla de la antropofagia gremial pero también de nuestra plena ignorancia. Como bien señala Juan Gerardo Pons Zepeda, Presidente del Consejo Directivo del Instituto Cultural de León, no se puede salvaguardar lo que no se quiere y no se puede querer lo que no se conoce. Si como sociedad –ya no solo como arquitectos- no reconocemos que lo único que nos vincula es el pasado (esas obras que nos preceden), estamos en el naufragio perdiendo pedazos de nuestra memoria.








Fotografía cortesía Mariano Arreola

Fachada y Croquis de localización: Paulina Amador

*Marcos Betanzos (Ciudad de México, 1983) es arquitecto, fotógrafo y profesor de cátedra en el Tecnológico de Monterrey Campus Santa Fe y CENTRO. Becario FONCA 2012-213, integrante de FUNDAMENTAL, taller de arquitectura, paisaje y urbanismo.

1 comentario:

  1. EL Arq. Atolinni Lack fue discípulo del Arq. Francisco Artigas quién realizó mucha obra en el Pedregal y padeció exactamente del mismo problema al desaparecer la casa del risco por un edificio vertical , es una pena la casa 402 de Jardines del Moral es también patrimonio arquitectónico de la ciudad de León.

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